Al principio nada parecía ir bien: los caminos confusos, la entrada dificultosa, los accesos bloqueados....
Deliciosa sensación de pérdida, de extravío. Deleite de ignorar dónde se está.
Administrar el agua y las energías; mantenerse fiel al llamado de las rocas...
Por fin las piedras, los líquenes secos al final del verano. Los colores rosas, ocres, amarillos pálidos... Una conjunción extraña, inconcebible salvo ante la evidencia, de dureza y suavidad; de fuerza milenaria y sutileza...
Anidar, encontrar refugio durante algunas horas: el silencio, la alta soledad... Avidez, deleite...
Encuentro en la fotografía otra forma de jugar con las cosas.