miércoles, junio 04, 2014

MADRE E HIJA

Madre,

Estos son mis despojos
que pongo aquí a tus pies
como un cumplido homenaje
de mi odio.

Como ves
la devastación fue completa
y de la lozana niña que pariste
nada queda.

Ya soy casi una vieja.

Solo espero que
tu senilidad no impida  
que valores mi obra y
reconozcas mi triunfo.

¿O aún en tu avanzada senectud insistirás
en simular tu insidioso amor de madre
el abrazo del que huí espantada
y al que ahora
vuelvo derrotada?


Junio, 2014